Nadar y bucear, ¿en qué consiste realmente? ¿Es necesario saber nadar para bucear? Adentrarse en un mundo nuevo y desconocido es muy divertido. Estar en un entorno tan diferente al que conocemos cada día significa superar nuestras barreras interiores y nuestros miedos, pero también descubrir colores, figuras, formas de vida invisibles desde el exterior.
Sin embargo, muchas personas se preguntan si es necesario nadar perfectamente para bucear, o si una persona que no sabe nadar en absoluto puede soñar con sumergirse en una piscina, un mar o un océano. Intentaremos responder exhaustivamente a estas dudas
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La natación y el buceo no son lo mismo
La cuestión de las habilidades de natación siempre surge en un curso para principiantes. Muy a menudo se da la situación de que una persona de la pareja se inscribe en el curso, mientras que la otra prefiere quedarse en la orilla. Cuando se le pregunta por qué no quiere convertirse en buceador autorizado, responde que no sabe nadar bien
Se trata de un gran malentendido y de un enorme mito, cuyo origen no puedo rastrear. Quizá la consecuencia lógica de la capacidad de nadar sea la capacidad de bucear, pero nada más lejos de la realidad.
Los primeros pasos de un futuro buceador
El buceo no funciona para que uno pueda entrar en el agua y bucear sin entrenamiento. Además, ninguna persona racional lo hará. Sin formación por parte de un instructor de buceo autorizado, podemos limitarnos a nadar con una máscara y un tubo o a sumergirnos 1-2 metros para observar peces o flora desde arriba. Sin embargo, los que realmente quieren poseer la capacidad de bucear deben hacer un curso bajo la dirección de un instructor. Cada curso de formación está dirigido por un profesional, precedido de clases teóricas y realizado a dúo con un instructor que también se sumerge.
¿Quién puede probar el buceo?
Un futuro buceador debe tener al menos 10 años si bucea con equipo y lo mismo si participa en clases de apnea, el límite de edad superior no está especificado. No es necesario ser un atleta, pero es importante una buena forma física y una buena salud. Sólo las enfermedades graves excluyen el buceo, y entre ellas están las enfermedades mentales, la epilepsia o la hipertensión. También conviene recordar que toda persona que desee realizar un curso de buceo debe hacer una declaración de no tener contraindicaciones o presentar el correspondiente certificado de un médico.
Un buceador tampoco debe tener miedo al agua. Las personas que no soportan entrar en masas de agua más grandes, que se sienten mal cuando el agua les inunda la cara, que tienen pánico a los espacios reducidos, no sólo se sienten incómodas, sino que pueden suponer un peligro para los demás participantes en el buceo si empiezan a comportarse de forma irracional. Por lo tanto, la clase está diseñada para personas que, como mínimo, se sienten cómodas en el agua y no tienen problemas para meterse en ella.
Si nadas, te sientes tranquilo, tienes autocontrol y ya has nadado en una piscina o en aguas abiertas, ¡el buceo puede ser para ti! Durante las clases con un instructor, la inmersión se realiza por etapas. Así, en cualquier situación, puedes decidir que no quieres profundizar o terminar la clase.
Sin embargo, debo añadir aquí que estamos hablando de graves bloqueos mentales causados, por ejemplo, por traumas experimentados u otros problemas mentales. Y en este caso, no significa que su camino hacia el buceo esté cerrado. A menudo buceamos con personas con discapacidades y utilizamos el buceo como método de tratamiento para muchos traumas mentales. Sólo que en este caso tenemos que enfocar el tema de forma un poco diferente.
Habilidades de natación mientras se aprende a bucear
Pero, ¿Cómo es esto de nadar y bucear? La natación es un método para desplazarse por la superficie del agua. Para nadar, utilizamos la fuerza de nuestros propios músculos. El buceo se realiza por debajo de la superficie del agua y utiliza un equipo adecuado. La capacidad de nadar es muy útil para aprender a bucear.
Una persona que puede mantenerse en la superficie y nadar la distancia de la piscina se siente mucho mejor durante la clase, tiene más confianza y no tiene que centrarse en las actividades básicas de natación. Por lo tanto, si sabes nadar, mejor para ti y para tu instructor. Pero, ¿tienes que ser necesariamente un súper nadador para convertirte en buceador? Por supuesto que no.
Natación vs. Buceo
Al bucear, el buceador va equipado con todo el equipo de buceo: chaleco, cilindro de aire, máscara de buceo, aletas. Todo esto ayuda a sumergirse y a permanecer bajo el agua más tiempo que en el caso del buceo con respiración contenida. Todo este equipo permite descender con seguridad a las profundidades, así como mantenerse en la posición deseada. Por otro lado, moverse bajo el agua es posible gracias a las aletas. Y de hecho, la capacidad de nadar es…. completamente innecesaria.
Natación vs. Apnea
La inmersión en apnea consiste en bucear sin los cilindros, pero sólo con la respiración contenida. Durante este tipo de inmersión, el buceador tiene una máscara, un tubo y aletas. Y estoy de acuerdo en que para este tipo de entrenamiento se necesitan mejores habilidades de natación. Por supuesto, nadie espera que se consigan resultados olímpicos, pero merece la pena que un buceador sea capaz de nadar 200 metros en estilo libre en una piscina tradicional. Una persona que quiera convertirse en buceador en apnea debe pasar un examen de natación. Suele consistir en nadar 200 metros sin aletas o 300 metros con aletas.
Entonces, ¿es necesario saber nadar para bucear?
Así que, como puede ver, el buceo con equipo y la natación o incluso el snorkel es algo completamente diferente, aunque pueda parecer lo contrario. ¿Tiene que saber nadar perfectamente para pensar en un curso de buceo? Definitivamente, no. Por supuesto, ser capaz de manejar el agua y no entrar en pánico son habilidades que vale la pena tener, incluso si no quiere convertirse en buceador. Sin embargo, nunca más diga que no hará un curso de buceo porque no sabe nadar bien.
